Angel Mestres | Emprende cultura #3
Los debates contemporáneos están repletos de pronósticos incumplidos y de nuevas aplicaciones y herramientas imposibles de aprehender. Querer predecir el impacto de la tecnología en el desarrollo futuro de la cultura está, así, prácticamente condenado al fracaso, pero no por ello deja de ser un ejercicio interesante. Al fin y al cabo, lo único cierto es que el auge de la tecnología conlleva profundos cambios en la configuración de la sociedad y en sus pautas culturales: se transforman nuestros conocimientos y los modos de acceder a ellos y combinarlos, nuestras formas de expresión e identificación, y los modelos de organización cultural. Ante ello, se hace imprescindible experimentar, arriesgar, ensayar, innovar: el ensayo-error como metodología infalible.