Tony Ramos Murphy | eldiario.es
Después de una década de desmantelamiento del sistema cultural autonómico (como botón de muestra, el presupuesto de cultura ha pasado de 63 millones de euros en 2008 a 16 millones en 2016), toca su reconstrucción urgente y rápida activación dirigida a “aprovechar el poder de la cultura para el desarrollo social, la cohesión, el bienestar y el crecimiento económico” (como apunta la Nueva Agenda Europea de la Cultura de la UE). El Gobierno de Canarias cuanto antes debe acusar recibo de las tendencias más dinámicas de nuestro entorno y superar continuidades e inercias si pretende revelarse como el agente promotor del cambio político, económico y social que declara ser.